Con la perspectiva de mi próxima exposición (2005), en ese preciso trance de mi vida y ante la oportunidad de llevar cabo un grupo coherente de obras; mi propósito, intención o hilo conductor, al plantear esta etapa de mi trabajo ha sido el de reunir en una serie de trabajos contrapuestos y relacionados entre si por dos características básicas:
Por un lado los objetos de guerra o de agresión, contundentes o agresores en potencia, como han sido las balas o diferentes proyectiles, objetos punzantes, cilindros de gas con su carácter de uso doméstico transformados en bombas.
Por el otro lado, los seres vivos o los objetos evocadores, en representación de sus diferentes ópticas, grados de conciencia y significación, susceptibles de ser dañados por cualesquiera de estos objetos de guerra, de castigo o de seducción.